UN DÍA COMO HOY…
… el 18 de junio de 1570, en Mataró, nació el compositor y organista Juan Pablo Pujol. Escribió música para las catedrales en las que trabajó: Tarragona, el Pilar de Zaragoza y Barcelona. Además de la música religiosa compuso música popular secular.
LA OCTAVA DEL CORPUS

Algunas de las celebraciones más importantes en la liturgia tenían octava, es decir, que la celebración se extendía durante ocho días. En muchos casos el octavo día, el más celebrado solía tener una solemnidad similar al de la fiesta en sí.
Las octavas en la actualidad se limitan a dos: la octava de Navidad (25 de diciembre – 1 de enero) y la octava de pascua (domingo de resurrección al domingo siguiente); pero en el misal anterior existían algunas otras celebraciones, como el caso de la solemnidad del Corpus Christi que tenía octava. Recordemos que esta solemnidad se encuentra trasladada de forma habitual al domingo en muchos lugares, pero que su fiesta es el jueves posterior a la Solemnidad de la Santísima Trinidad, y que, por tanto, al jueves siguiente se celebraba la octava. Este año 2020 según el calendario litúrgico del rito extraordinario, hoy estaríamos celebrando la octava del Corpus Christi.
MUSICA EUCARÍSTICA DE PUJOL
Entre las obras del autor que hemos mencionado escogemos hoy dos que nos pueden servir para la meditación y la oración.

HIMNO DE MAITINES AL SANTÍSIMO SACRAMENTO
Al igual que el himno eucarístico Pange lingua – Tamtum ergo, hace mención del antiguo rito (de la Pascua) del cual Cristo funda un nuevo rito. Él da su cuerpo-pan a los que tenemos flaquezas y hambre en nuestro espíritu, y su sangre-vino a los necesitados de alegrías por las tristezas de la vida (Como a flacos les dió a comer su cuerpo; como a tristes les dió a beber su sangre). El gran misterio de la eucaristía de como el Dios que todo lo puede ha muerto en la cruz y se deja comer se expresa con un bella máxima: ¡Oh maravilla! El pobre y el esclavo comen el cuerpo de su propio dueño.
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SI DEL PAN DE VIDA
Hay de destacar la dimensión de pureza para acercarnos a la eucaristía a la que exhorta este canto. Se inspira en San Pablo para llamar la atención a quien se acerca sin estar preparado. Si la carta paulina dice quien come y bebe sin discernir el cuerpo come y bebe su condenación, el compositor recuerda al fiel que si a ti te es dañoso será culpa tuya, que de parte suya siempre está sabroso. Además, usa una comparación con el color blanco del pan para mostrar a quien está destinado: Su blanca corteza bien nos significa, que sólo se aplica al de tal limpieza.
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