«Ningún querubín cierra ya con espada de fuego la entrada del magnífico jardín de Dios»: es la gloria de la Cruz.

Bonifatia Brügge, «Mirabiliter condidisti, mirabilus reformasti. El Hombre en la creación y en la nueva creación» en: Benedictinas de Herstelle, Nuestra Pascua (Madrid 1962), 183-185. Cuando con su consumatum est (Juan 19, 30), exhaló en la cruz su último aliento, se repitió lo que había sucedido al principio: Dios inspiró el «aliento de vida» (GénesisSigue leyendo ««Ningún querubín cierra ya con espada de fuego la entrada del magnífico jardín de Dios»: es la gloria de la Cruz.»